jueves, 31 de diciembre de 2015

Digest: Diciembre 2015


Pues estas son las cosas que han pasado durante el mes de Diciembre:

- Por PRIMERA VEZ me pide perdón. Le cuesta y la deja muy avergonzada pero al final dice: "Papaaaa... Perdóoooon" (3 diciembre)

- Estando en el Pueblo, en la cocina, intenta abrir la puerta del frigorífico y como no puede va y llama dando golpecitos en los nudillos en la puerta... supongo que esperando que alguien le abra la puerta. (6 diciembre)

- Estando en el Pueblo, subimos a la cocina de arriba y según entre dice: "Mmmm vaya cocina más bonita!". Le pregunto que qué cocina le gusta más, la de arriba o la de abajo, y dice que la de abajo porque tiene más sillas. (6 diciembre)

- Confunde "enciende" con "apaga" la luz, y viceversa. (12 diciembre)

- Viendo en Youtube uno de esos videos que tanto le gusta de una persona abriendo huevos sorpresa y mostrando lo que hay dentro, deduce que la que los abre es una señora (supongo que por cómo son las manos y porque tiene las uñas pintadas). (12 diciembre)

- Contándole el cuento de "La niña que no tenia nombre" me equivoco y en una página equivoco y digo "niña" en vez de "niño" (que era lo que ponía) y ella enseguida me corrige. (21 diciembre)
- Dice que no encendamos la luz de la cocina por las mañanas... porque así se ve mejor la tele. (23 diciembre)

- Raque le lee el cuento de "La niña que no tenía nombre" dejando versos incompletos y ella demuestra que se lo sabe de memoria terminándolos sin equivocarse.

- En Nochebuena Papá Noel le dá los regalos de Navidad. Después, mientras los está abriendo me dice que yo era Papá Noel. Hay video de Raquel. (24 diciembre)

- Le encanta especialmente uno de los regales de Papá Noel: la Mona Monita. La lleva en carro y la pasea. Le hace mucha gracia cuando dice "ajo". (25 diciembre)

sábado, 26 de diciembre de 2015

Comunicación, lenguaje y pucheros


Es patente que en los últimos meses Norah ha experimentado una gran evolución en cuanto al tema del lenguaje se refiere. De ser una niña introvertida y tímida que casi no hablaba mucho con la gente que conoce y nada con la que no conoce a pasado a ser una niña introvertida y timida que habla mucho con la gente que conoce y poco con la que no conoce :D

Parece que no pero la verdad es que ya se va soltando bastante con la gente desconocida. Si por ejemplo viene un adulto a decirnos algo, ella se calla y cuando se va siempre te pregunta: Quien es? Si el adulto se dirige a ella, hay veces que sí responde con monosílabos. Otras veces directamente junta la barbilla con el pecho y se trata de esconder para no responder. 

Si es un niño/a el que se dirige a ella, normalmente se extraña un poco pero finalmente puede responder tímidamente. Donde no hay tregua es cuando es ella la que tiene que dirigirse a un niño/a porque ha hecho o esta haciendo algo mal. Si por ejemplo, un niño está montando en el columpio de pie o está tirando tierra al tobogán, ella normalmente se dirige a ellos y les dice: Niño! Eso está maaall!!! No se hace! No tires tierra tobogán!! o No pongas de pie en tobogan! Te caes y coscorrón!

Siempre que la recogemos de la guardería nos cuenta historias que supuestamente han pasado allí. Y digo "supuestamente" porque no las hemos contrastado con las profesoras y no sabemos si son verdad o simplemente producto de su imaginación... que ya tiene una cuanta. Que si D a pegado a E y E llora. Que si G empuja a E y E llora. Que si D coge del pelo a G y E llora. Que si E no tiene huevo y llora. Esto último se lo preguntamos a la profesora y sí que parece que tenía sentido (no penséis mal).

Ahora cuando te explica las cosas tiende a gesticular mucho, moviendo las manos y poniendo caras. Además cuando cuenta las cosas utiliza conectores básicos en las frases para unirlas y que parezcan una conversación de una persona normal. 

La actitud en la Guardería también ha evolucionado. La profesora nos dijo la semana pasada que era la que mejor notas tenía de toda la clase. Que había cambiado mucho y que ya no era tan tímida. Que se comunicaba mucho y participaba un montón en todas las actividades... pero además de forma responsable y no haciendo el bruto o a lo loco como algunos compañeros. Decía además que razonaba las cosas :D 

Está claro que Norah sabe que hacer gestos es una faceta más de la comunicación y lo tiene muy interiorizado porque es especialmente dramática contando algunas cosas... como cuando te dice que uno de sus peluches se ha hecho daño y hay que curarlo. Últimamente ella siempre dice que es la "médico" y tú el "doctor". Me hace gracia pensar en que sepa realmente la diferencia :D

Hoy por la mañana se ha tirado como 20 minutos hablando con la abuela sobre un montón de cosas que ahora no recuerdo, y la abuela no hacía más de que murmurar: "Yo me la como". "Mira que caras pone". Y Norah inmutable seguía con su historia. 

Otra de las cosas que ha aprendido también a hacer muy bien es la de poner muecas según la situación que toque. Si ha hecho algo mal y después de un tiempo tiene que pedir "perdón" pone esa cara de "lo siento me he equivocado, no volverá a pasar" aunque al día siguiente lo vuelva a hacer. Cuando está jugando a que se enfada, frunce el ceño de una manera exagerada a la vez que cruza las brazos y suelta un interminable suspiro, como cuando está haciendo de Pupu cuando Tiger le destroza el huerto de tanto saltar. También se le da de maravilla reírse como una loca, mirando al techo y abriendo la boca al máximo, soltando carcajadas que parece que se ahogan por falta de aire ... y al segundo después poner cara seria.

Para terminar, he de decir que es una especialista en poner pucheros. Lo hace cuando está enfadada o emperretada con algo que no le dejamos hacer. Así que ahora lo que hace es sentarse en el suelo y soltar alguna patada al mismo, lo que termina en un llanto porque se ha dado "un coscorrón" en el pie y le duele mucho... a lo que hay que responder con carantoñas y mimos para curarle esa "herida imaginaria" del pie, cuando en realidad lo que probablemente esté buscando en eso que dice Sari muchas veces de validar sus sentimientos. Y la prueba es que normalmente al minuto ya no se queja del dolor del pie.  

También pone pucheros cuando tiene que pedir algo que sabe que es muy difícil conseguir, como que le pongan canciones cuando es la hora de ir a cenar o cuando tenemos que irnos de la casa de los abuelos porque ya es tarde. O cuando Mamá le dice que Papá hoy no va a poder leerle el cuento porque tiene que hacer cosas. Esto es especialmente traumático para ella, porque cuando le dicen que Papá no va a poder hacer algo con ella porque X, siempre se imagina que Papá se tiene que ir lejos y no va a volver durante unos cuantos días, que es lo que pasa cuando se tiene que ir a trabajar. Hoy así ha sido y Norah a empezado a hacer pucheros y llorar poniendo los labios hacia abajo de manera que las comisuras se convierten en como unos piquitos de piel (sí, suena raro pero es así)... algo que no he visto hacer a nadie más y que hace que se te caiga el alma al suelo.

Lo bueno, es que a pesar de los 2 años y 9 meses que tiene, ya se le puede explicar todo que lo entiende perfectamente. Otra cosa es que consigas convencerla o no. Pero ella te escucha, te entiende y te expresa su opinión. En este caso después de comenzar a llorar (con piquitos de piel incluidos) diciendo que no quería que Papá se fuera, le explico que sólo voy a ir a mi habitación a leer unas cosas y que después iba a dormir con ella, pero que Papá no le iba a leer el cuento hoy. Ella se ha tranquilizado un poco. Más tarde, después de vestirla y prepararla para dormir ha empezado a llorar pidiendo que Papá le leyera el cuento. Al final hemos llegado a un acuerdo, donde era Mamá quien le leía el cuento, pero Papá iba a estar a su lado. Y cuando se terminara el cuento Papá se iba a su habitación y ella se quedaba con Mamá para dormir. Pues así ha sido. Después del cuento y de llevarla a hacer caca (falsa alarma) me he despedido de ella y de Mamá. Ella ponía una cara de sufrimiento que conseguía que el alma siguiera donde estaba antes. Al final Mamá dice: "Que estudies mucho". Y ella puntualiza: "Nooooo! Estudia muy po-qui-to!" (con su voz todavía llorosa). ES PA COMÉRSELA O NO???


domingo, 6 de diciembre de 2015

Amigos y emociones

En la guardería Norah tiene un "amigo especial". Se llama Eidan. Es algo más pequeño que ella y a menudo es ella la que lo cuida. Si él llora, ella lo consuela. A veces parece que lo ha querido mangonear un poco, mandándole hacer esto o aquello. Pero hace un par se semanas nos pusieron un mensaje en la agenda diciendo que ella había estado un poco agobiada porque su amigo no quería que ella jugara con nadie más. En general siempre habla mucho de él, dice que lo quiere mucho, que se dan besos... También se lleva bien con otros compañeros, aunque hay otros grupúsculos. Por ejemplo, su amiga D. hace una especie de trío con dos niños, G. y H.S. Curiosamente, el otro día ella se puso a decir en la bañera que si Eidan era guapo, que si tal o cual era guapo o guapa... Hasta que dijo que HS era muy muy muy muy guapo, con una sonrisa pícara.
La verdad es que este tipo de cosas no sé si les surgen naturales o si son algo que observan en los adultos. A ella los abuelos a menudo le dicen "Quién es la más guapa..." y ella lo completa "del mundo entero? Norah!". En realidad yo preferiría que no se centraran tanto los halagos en la belleza exterior, pero la verdad es que objetivamente ella es muy guapa. Aun así, me gustaría que creciera más centrada en desarrollarse en el deporte y el intelecto que en la belleza exterior. 
La cosa es que me parece que es bastante inteligente también. Entiende perfectamente todo lo que se le dice en castellano y finés, y bastante de inglés. Los números hace tiempo que se los sabe en los 3 idiomas, y parece que va conceptualizando las cantidades. También sabe un montón de letras e identifica determinadas cosas si las ve por escrito (aunque creo que más por memoria de saber que en tal sitio pone tal cosa).
Este otoño a ratos ha tenido algún día de más rabietas. David y yo hemos tenido alternativamente más trabajo, y acusa bastante el que no pasemos mucho tiempo los tres juntos. Sobre todo cuando él estuvo de viaje, estaba bastante triste. 
Y es que ha aprendido a expresar las emociones. En la guardería identifican las emociones con colores, un poco parecido a la película "Del revés" (que no la he visto pero David sí), aunque no coinciden del todo. Así, azul es tristeza, rojo enfado, verde tranquilidad, amarillo felicidad o alegría, rosa enamorado y negro miedo. Cuando David estaba de viaje (dos semanas del tirón sin ver a su padre más que un ratín una tarde en medio) decía todas las tardes que estaba azul y triste. Ponía morritos. A ratos le daba una rabieta y decía que estaba roja. Lloraba y decía "papaaaaa papaaa - estoy azul". En realidad, el saber identificar las emociones nos ayuda a todos. Cuando está enfadada o triste ella misma lo dice y nos ayuda a validar sus sentimientos.
A veces esas emociones le surgen de forma repentina, sin previo aviso y con una intensidad espectacular. Puede estar de buen rollo y tan contenta, y de repente hacer "clic" y ponerse "roja enfadada", sin saber realmente explicar el motivo.Vive el momento con intensidad. También es así con sus muestras de cariño. No es que esté todo el rato en modo besucona, pero a veces da abrazos y besos de forma espontánea y dice "Te quiero mucho, mamá". Otras veces lo acompaña con un "Soy tu hija."
Por lo demás, sigue con sus obsesiones variables. Ahora lleva una temporada con Pinocho. No sé cuántas veces se le ha leído uno de los dos cuentos de Pinocho (con el titiritero y con la ballena). Además canta la canción "Pinocho fue a pescar" y la película antigua de Disney también le gusta. Los dinosaurios también le siguen gustando - por cierto que hace unas semanas nos dejamos a Nino en un restaurante (estábamos con la abuela Ruut y las tías) y tuve que agenciarme otro... mientras tanto le dije que Nino estaba de viaje como papá. Aceptó con mucha naturalidad que luego volviera en forma de huevo y que tuviera otro color...
Por cierto, que ya estamos en diciembre. Serán sus terceras navidades. Este año le hemos hecho un calendario de adviento casero para que cada día saque un pequeño detalle. Está entusiasmada con ello. De momento ha sacado una goma, un lápiz y un sacapuntas de Frozen, una tarjeta con un lobo y una piedra = huevo de dinosaurio.
De momento es una persona que se ilusiona por cosas pequeñas, porque todo es mágico y especial y se impregna con el poder de la imaginación. Me gustaría que pudiera conservar durante mucho tiempo esa capacidad de entusiasmarse y de ilusionarse por cosas pequeñas.