Hoy ha sido un día emocionante. Papá y mamá me han felicitado diciéndome que ya tengo 5 meses. Para celebrarlo me han dado un mejunje que han sacado de una cosa que llaman "plátano" (papá) o "banaani" (mamá). Es amarillo, curvado, alargado y tiene pintas oscuras. Le han quitado el vestido amarillo y de ahí han cortado un trozo y lo han aplastado con un instrumento metálico de 4 puntas al que llaman "tenedor" o "haarukka". Luego, con una "cuchara" o "lusikka" me metían en la boca aquello. Buf, no sé si me ha gustado o no, aún no lo he decidido. No se parece nada a la leche de mamá. De hecho, luego lo han mezclado con la leche de mamá. ¡Qué asco!, eso no es comestible, ¿es que no os dais cuenta? Mamá y papá desde luego no han hecho amago de comerlo. En fin. Como no tenía claro si eso estaba bueno o no (el plátano), a ratos lo escupía pero al final consiguieron hacer que tragara una parte. Menos mal que antes me dieron una buena dosis de leche que si no vaya hambre iba a pasar.
Luego, vino un señor y le trajo una flores a mamá, que se puso muy contenta y papá también. No sé qué decían de 8 años, no me lo explicaron.
Y más tarde nos fuimos en el coche. No pude evitar dormirme como siempre. Creo que me echan algo en la leche para dormirme cuando vamos de viaje para que no sepa adónde vamos. Si no, no se entiende.
Fuimos a un sitio donde papá y mamá comían un montón de cosas con una pinta mucho mejor que el plátano ése. Papá llamaba "churrasco" a lo suyo. No sé lo que es. No me dieron nada. Sí que me dejaron agarrar un trozo de "pan" o "leipä" pero en cuanto me lo llevaba a la boca mamá me lo quitaba. Así que no sé si estaba bueno o no. Decidí descomer un par de veces para ver si se descuidaban mientras me cambiaran e intentar quitarles algo del "churrasco" pero no salió bien y papá se lo comió todo.
Antes de marchar me enseñaron unos seres extraños, que hacían "oink oink" o "röh röh". Les llamaban "cerdos vietnamitas" o "vietnamilaisia sikoja". Eran unos bichos simpáticos. Uno me quería chupar el pie pero mis papás no le dejaron. Papá hizo muchas fotografías como siempre. Creo que es "fotógrafo".
Más tarde nos volvimos a montar en el coche. Aguanté un rato viendo "montañas" o "vuoria", todo verde. Qué bonito. Mamá iba a mi lado y me sonreía. Cuando me desperté estábamos en un sitio fresquito con más montañas. Lo llamaban Navacerrada. Dimos un paseo entre un montón de "pinos" o "mäntyjä". Olía muy bien. De vuelta en el coche de nuevo me dormí. Antes de llegar a casa fuimos al sitio donde recogen mamá y papá su comida. Vi allí más plátanos pero por suerte no cogieron más.
Por la noche ya me han dado mi baño de siempre, con mi amigo el pato al que algún día conseguiré arrancarle la cabeza.